Cuidar nuestro planeta es cosa de todos. Por eso, tenemos que modificar nuestros hábitos poco a poco para que, cada uno de nosotros, contribuyamos de forma activa a conseguir una mayor eficiencia energética y actuemos de cara a una sostenibilidad mayor. Llegados a este punto, tal vez te preguntes: y, ¿cómo puedo ser más eficiente energéticamente?
Sigue leyendo y descubre nuestras recomendaciones para que puedas poner tu granito de arena y conseguir un mundo mejor, sin casi darte ni cuenta.
Consejos para ser más eficiente energéticamente
Como decíamos, el truco para ser más eficiente energéticamente en tu día a día y en casa es cambiar progresivamente tus hábitos hacia algunos mucho más sostenibles:
- Utiliza electrodomésticos eficientes. Los marcados con A+++ son los que producen menor consumo energético, por eso, es preferible que, cuando adquieras uno nuevo, busques esta certificación.
- Pásate a las bombillas LED de bajo consumo. Lo notarás en la factura de la luz, pero también lo notará el planeta.
- No te pases con los aires acondicionados y las calefacciones. Utiliza los aparatos de forma responsable, creando una temperatura adecuada pero sin forzarlos.
- Intenta desplazarte en transporte público, bicicleta o a pie, siempre que sea posible. Lose efectos de los gases expulsados por los coches son más que conocidos, así que es preferible evitar su uso siempre que sea posible. Además, lo ideal sería poder utilizar vehículos eléctricos para pasarse a una movilidad sostenible.
- Aprovecha las fuentes de energías renovables. Conoce el autoconsumo y súmate a él, por ejemplo, con placas solares. De este modo, tendrás un consumo de energía mucho más sostenible y reducirás los costes de tus facturas de luz.
- Atento a las puertas y ventanas. El hecho de abrir cortinas o subir persianas, puede hacer que hagamos un consumo menor de energía durante el día. Esto ocurre tanto por la posibilidad de utilizar luz natural, como por la temperatura agradable que puede conseguirse cuando el sol calienta una habitación. Además, debemos controlar que tanto puertas y ventanas estén bien cerradas cuando hace frío, para evitar tener que encender un aparato de climatización sin que sea realmente necesario.
- Evita el consumo fantasma. Es decir, intenta desenchufar de la luz todos esos aparatos que siguen consumiendo aun sin estar encendidos. Esto ocurre con lavadoras, cargadores de teléfono móvil, televisores, secadores de pelo… Puedes solucionar estre problema desenchufándolos de la luz o, simplemente, utilizando una regleta con interruptor.
- No abuses del agua caliente. Reduce unos grados la temperatura del agua para ahorrar también en la factura de luz. Por ejemplo, no utilices agua tan caliente en la ducha, el grifo o la lavadora.
- Instala ventiladores en verano. Tal vez parezca que no es lo mismo pero un ventilador puede bajar la sensación térmica hasta 4 grados. Esto hará que enciendas menos a menudo los aparatos de aire acondicionado y, por lo tanto, seas más eficiente y ahorres en tus facturas.
- ¡Apaga las luces! Apretar un interruptor es un gesto sencillo que puede suponer un ahorro de energía importante. No te dejes la luz encendida cuando sales de una habitación, por mucho que sea solo por unos minutos.
Venga, haz un esfuerzo y ves introduciendo estos hábitos en tu rutina diaria. Y si quieres saber más sobre las instalaciones de energía solar de Nostresol, no dudes en contactarnos sin compromiso para recibir la visita de un técnico que estudie tu caso.