Desde hace ya un tiempo y siguiendo el PNIEC, Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, la descarbonización y el abastecimiento energético por medio de energías renovables es un objetivo que debe conseguirse lo más rápido posible para combatir todos los efectos secundarios que está sufriendo el planeta por la contaminación.
En esta búsqueda por ampliar el catálogo de energías renovables, el Ministerio de Transición Ecológica ha dado un paso más en su plan para instalar plantas fotovoltaicas flotantes sobre el agua de los embalses. Este avance ha tenido lugar este mismo lunes en el Consejo Nacional del Agua, y aunque no ha tenido votación unánime, la gran mayoría de los representantes de las comunidades autónomas han dado el visto bueno.
Beneficios y ventajas de las plantas fotovoltaicas flotantes
- El agua desempeña un papel esencial en el aumento del rendimiento del sistema. Como os hemos dicho muchas veces desde Nostresol, el calor sobrecalienta el sistema y hace que se consiga un menor rendimiento. En este caso, el agua rebaja la temperatura y consigue un funcionamiento óptimo. Además, al estar ubicados en grades espacios de agua la instalación acumula poco polvo y trabaja más eficientemente.
- Como el sistema se coloca directamente sobre el agua con una estructura flotante, no tiene obstáculos terrenales y es fácil y rápido de instalar y administrar.
- Según la superficie que cubre y las condiciones climáticas de la zona, estas plantas fotovoltaicas pueden provocar una reducción de la evaporación del agua del propio embalse.
- Técnicamente y económicamente factible, las instalaciones de energía solar fotovoltaica flotante (PV) abren nuevas oportunidades para ampliar la capacidad de generación solar.
Condiciones y reglamento
Obviamente, para no explotar los embalses públicos con estas instalaciones, todo estará regulado y deberá cumplir unas determinadas condiciones. Si quieres conocer tales condiciones pincha aquí para ver la nota de prensa realizada por el propio ministerio.
